sábado, 30 de abril de 2011

Pan con nueces casero (fácil) PASO A PASO con vídeos

¿Harto del pan precongelado del supermercado? ¿ Harto de que al hacerte un bocadillo la corteza del pan se rompa en mil pedazos? ¿Cansado de que el pan esté gomoso de una hora para otra? Pues esto se acabó. Hoy os dejo una estupenda receta que encontré por casualidad en Youtube y que siempre queda bien.
Este fue mi primer pan y lo que más me sorprendió fué lo fácil que era de hacer y los buenísimos resultados obtenidos. Es un pan de aspecto rústico, muy bonito y por dentro tiene una miga muy agradable.
Con el tiempo he ido haciendo más veces la receta y perfeccionando algunos aspectos que luego os comento.
Si queréis saber cómo se realiza os dejo un vídeo de Isasaweis donde lo explica de maravilla. A continuación los ORNIconsejos xD

Ingredientes:

175 ml de agua
1 cucharilla de sal
1 cucharada de aceite de oliva
15 grs de levadura fresca o un sobre de levadura liofilizada
310 grs de harina de fuerza

Opcional: nueces, pipas de girasol ....

Preparación:

Empezamos echando en un cuenco apto para microondas, el agua y el aceite, metiéndolo al microondas unos segundos para que se temple (cuidado con la temperatura porque podemos matar la levadura) y agregamos la levadura fresca desmenuzada, removiendo bien con una cuchara hasta su disolución.
Echamos en un bol grande e incorporamos la harina y la sal (una cucharilla) y las semillas que queramos y o bien ponemos en marcha la amasadora o bien empezamos a remover bien hasta que se integre.
Cuando empiece a despegarse de las paredes de la amasadora o del bol, la ponemos en la mesa enharinada y la trabajamos con las manos durante un buen rato. Sabremos que está bien amasado a través de la prueba de la membrana ( consiste en estirar suavemente de un trocito de la masa; debe formarse una membrana, la masa no debe desgarrarse, si fuera así habría que amasar un ratito más)
Formamos la bola y la colocamos dentro del bol que habremos engrasado previamente con un poco de aceite ayudándonos de un papel de cocina y colocamos la masa a la que haremos unos cortes con un cuchillo de sierra o cutter.
Pintamos con aceite y espolvoreamos con harina, ponemos la tapa y metemos al horno que estará apagado.
Lo encendemos a 220º y lo dejamos unos 40 o 45 minutos hasta que la superficie esté dorada.
Cuando lo saquemos lo dejamos enfríar sobre una rejilla.




Y otro vídeo, en este caso de Webos Fritos para qué veáis otra forma de hacer la misma receta (con y sin levado) :




Aquí también os dejo un par de vídeos sobre como formar una bola de masa:

Este primero es el que más me gusta por lo bien que queda pero muchos panaderos lo hacen como en el segundo vídeo:





OJO con:

- La levadura fresca: es importante saber que la levadura fresca jamás debe entrar en contacto con la sal, ya que ésta "mata" la levadura. Yo lo que suelo hacer es amasar un poco todos los ingredientes y a mitad de amasado añado la sal, así evito el contacto directo con la levadura.
- La masa y su amasado: ha de quedar ligera y elástica, cuando ya no se pega a las manos y está flexible, es que está perfecta. Un amasado durante unos 10 minutos sería lo ideal, si no tenemos paciencia siempre podremos recurrir a la amasadora.
Técnicas para amasar:
Esta primera es la que más me gusta pero la más difícil:



Segunda técnica:



- El levado: este pan en principio no necesita levado y queda igualmente estupendo pero si os gusta la miga esponjosa no hay problema en, una vez preparada la masa, dejarla leudar o levar (esto es meter la masa en un bol previamente enharinado para que no se pegue la masa y taparla con un pañito limpio humedecido, dejando el bol en un lugar templado, a salvo de corrientes de aire).
Dejaremos la masa así durante una hora o una hora y media y será entonces cuando la masa habrá crecido hasta doblar su tamaño, sabemos que ha llegado al punto cuando presionamos ligeramente con la yema de los dedos y dejamos una marca que desaparece poco a poco, yo la dejo leudar en el propio pyrex donde se va a realizar la receta, ya que luego el paso de un recipiente al otro es imposible. Ya está lista para hornear, ahora se procede igual que siempre, es decir se le dan cortes y se pincela con aceite, espolvoreándose con harina.
- El corte: en el pan hay que hacer cortes para crear puntos sin tensión, con ello facilitamos la expansión del pan; éstos habrán de hacerse con un cutter u otro útil muy afilado, dándose un corte limpio y rápido.
Si utilizáis amasadora os recomiendo compraros un cutter ya que la masa queda tan elástica que muchas veces el corte se retrae y no queda marcado. Con un cutter habremos resuelto este problema pero recordad... hay que cortar con decisión. Os dejo un vídeo para que veáis cómo se hace:



- Los frutos secos: este pan admite muchas variantes, nueces, pipas, semillas de amapola. Simplemente recordad que las semillas y frutos secos se añaden siempre cuando la masa ya ha sido mezclada, si lo hacéis mientras todavía hay restos de líquido los frutos que añadáis se quedarán blandos, las pipas sosas etc...
- El enfriado: el pan debe enfriar siempre sobre una rejilla, así evitamos que le "sude" el "culete" y quede blando.

Aquí os dejo una foto de mi primer pan con esta técnica.

lunes, 25 de abril de 2011

Ravioli con champiñones, mascarpone y nueces

Después de esta larga pausa vacacional me apetece actualizar el blog con todo lo que he ido haciendo estos días.
Esta receta está tomada de L'exquisit y es sencilla a la par que deliciosa. Además es otra forma de comer pasta, que gustará a todos.
Sonia utiliza tortellini de queso, yo raviolis, en concreto los raviolis 4 quesos que se venden en la sección de refrigerados de Mercadona. Vienen dos raciones, en principio podría parecer una cantidad algo justa pero os aseguro que con esta salsa nos quedamos plenamente satisfechos.
Vamos allá!!!!

Ingredientes (2 personas) :

Raviolis 4 quesos (pasta fresca)
100 grs de champiñones (yo utilicé una lata de champiñones ya listos del Mercadona)
1/2 cebolla pelada y cortada fina
50 grs nueces picadas
1 diente de ajo picado
90 grs de mascarpone a temperatura ambiente
15 grs de queso parmesano rallado (yo le puse queso provolone)
perejil picado
1 cucharada sopera de aceite de oliva
sal y pimienta

Preparación:

Picar las nueces en la picadora, si no tenéis las podéis picar a mano, dejadlas en trozos más bien gruesos.
Hervir los ravioli según las instrucciones del paquete y mientras, en un cuenco mezclar el parmesano o provolone rallado con el mascarpone a temperatura ambiente.
Pochar la cebolla en la sartén con un poco de aceite e incorporar los champiñones en rodajas, saltear, salpimentar y remover hasta que pierdan el líquido. Añadir el ajo picado y remover un minuto.
Incorporar a la sartén la mezcla de quesos y remover hasta que todo quede homogéneo, añadir entonces las nueces y el perejil y probar la salsa por si fuera necesario volver a salpimentar.
En cuanto la pasta esté cocida incorporar a la sartén con 1 ó 2 cucharadas del agua de cocción, remover bien hasta integrar y servir inmediatamente.
Decorar el plato con nueces y perejil picado.


OJO con:
- La pasta: podemos utilizar indistintamente raviolis, tortellini, lo que queramos, lo importante es que no nos pasemos con el tiempo de cocción. Éste es uno de esos casos en que es preferible que la pasta quede al dente.
- Los champiñones: si son de lata y vienen ya preparados ahorraremos mucho tiempo en la confección de este plato.
- El queso rallado: a mi personalmente el provolone es un queso que "no me dice nada", lo encontré demasiado ligero. Si no encontráis parmesano (que creo que es el más apropiado) probad con cualquier otro queso que sea de tipo curado (podéis rallarlo en casa vosotros mismos)
Se trata de un plato contundente, así que si tenéis planeado un postre, mejor que sea ligero.

Croquetas de jamón

Riquísimas croquetas caseras, un plato tradicional que nunca defrauda.

Ingredientes:

100 grs de jamón serrano en taquitos
1 cebolla mediana
30 grs de mantequilla
3 cucharadas de aceite de oliva
3 cucharadas de harina
1/2 litro de leche fría

Preparación:

En una sartén ponemos el aceite y la mantequilla y cuando se calienten echamos la cebolla cortada muy finamente, dejándola pochar durante 5 minutos.
Añadimos el jamón serrano y le damos unas vueltas para que coja sabor, a continuación toda la harina de golpe y procuramos que se tueste para que luego la bechamel no nos sepa a harina.
A continuación añadimos la leche fría, poco a poco, es decir, hasta que no se haya absorbido una parte, no echar la siguiente. Así hasta terminar con la leche.
Vamos revolviendo con cuchara de madera hasta que esté cremoso y no haya grumos. Sabremos que está listo porque dejará de pegarse a la sartén. Yo estuve un buen rato largo.
A continuación pasamos a un tupper que habremos engrasado previamente con una gotita de aceite de oliva y cubrimos con papel film engrasado, dejando la mezcla en la nevera hasta que se enfríe ( si es toda la noche, mucho mejor ).
A continuación pasamos por harina, huevo y pan rallado y freímos en aceite bien caliente.




OJO con:

- La bechamel: si queréis una buena bechamel añadid toda la harina de golpe, dejad que se tueste antes de añadir la leche (así evitaremos el sabor a harina cruda tan molesto) y la leche, siempre caliente, la tenéis que echar poco a poco.
Normalmente la proporción es 100 grs de harina por cada litro de leche.
La leche la añadimos en 3 tandas. Echamos leche, removemos y cuando esté bien integrada añadimos  otra poca, así hasta terminar con ella.
Hay quien sustituye parte de la leche por caldo de pollo para hacerlas más sabrosas.
Yo utilizo unas varillas para remover, en lugar de una cuchara de madera, ya que así se evitan los grumos. Tenéis que estar unos 20 minutos sin parar de remover. Estarán listas cuando se despeguen de la sartén.
Si queréis darle un toque más rico a la bechamel  podéis ponerle un poquito de queso rallado de vuestra elección, por ejemplo queso parmesano o cualquier otro con un sabor fuerte, huevo duro rallado etc...

Si la mezcla la dejamos en la nevera de un día para otro gana cuerpo y están más ricas.

Os aconsejo que lo hagáis con pollo, pavo, taquitos de jamón o cualquier otra carne consistente.

Este es un plato que compensa realizar en cantidades importantes ya que luego, una vez elaboradas antes de freírlas las podemos congelar en un tupper y así tenerlas listas para futuras ocasiones.

domingo, 17 de abril de 2011

Ensalada alemana

¿Os apetece algo fresquito? Estamos todavía en abril pero el calor acecha y qué mejor forma de combatirlo que con una deliciosa ensalada, extremadamente sencilla.
Vamos allá!!!

Ingredientes (2 personas):

2 patatas medianas o grandecitas
1/2 cebolla
pepinillos en vinagre
2 salchichas de frankfurt
2 o 3 cucharadas de mayonesa
1 cucharada de mostaza
aceite
sal
perejil

Preparación:

Cortamos las patatas en daditos no muy grandes y a ser posible de un tamaño regular. Las ponemos a cocer en abundante agua con sal. En unos 5 o 6 minutos comprobar que estén hechas.
Una vez hervidas las escurrimos y reservamos.
Entre tanto vamos friendo las salchichas de frankfurt en un pelín de aceite hasta que queden doraditas. Cortamos la cebolla y los pepinillos y mezclamos con las salchichas que habremos cortado en rodajas y los daditos de patata.
A continuación en un bol aparte mezclamos aceite y sal y ponemos 2 o 3 cucharadas de mayonesa y 1 cucharada de mostaza. Removemos bien hasta obtener una salsa uniforme.
Luego vertemos la salsa sobre la mezcla de patata, pepinillos y salchichas y removemos unas cuantas veces hasta que quede todo integrado.
Lo dejamos en la nevera 1 hora antes de servir y decoramos con perejil picado.

OJO con:
- La cebolla: si creéis que la cebolla pica demasiado, un buen truco es dejarla en agua con vinagre (o limón) durante una media hora y a continuación lavarla. También hay quien la sumerge en leche durante media hora o incluso la deja con azúcar durante unos 10 minutos y la lava después.
Hay trucos para todos los gustos.
- Las patatas: no os paséis con la cocción porque si quedan blandas el plato pierde gracia.



sábado, 16 de abril de 2011

Arroz con costillas

Hoy os traigo este riquísimo arroz con costillas. Es una receta propia que triunfa cada fin de semana y sólo os hace falta una paella donde prepararlo, ya que los ingredientes son comunes y fáciles de encontrar en cualquier hogar. Con los trucos que os doy os quedará siempre suelto y muy sabroso.
Veréis qué facilito, merece la pena.
Vamos allá!!!

Ingredientes:

Arroz (no os preocupéis por la cantidad, luego os digo como lo hago yo)
Agua (os digo lo mismo que con respecto al arroz)
Unas 4 costillas de cerdo por persona
1 cucharada de tomate triturado
2 dientes de ajo picados muy finos
1 cucharilla de pimentón dulce
Aceite de oliva
Colorante
Sal

Preparación:

Lo primero que tenemos que hacer es separar las costillas del costillar con un cuchillo bien afilado y sin retirar la grasita que llevan, de tal forma que tengamos unas 4 costillas por persona. Las salamos.
A continuación ponemos un poco de aceite en una sartén y sofreímos las costillas hasta que cojan colorcito.
Cuando ya casi están doradas del todo echamos los dos dientes de ajo laminados y revolvemos un poquito para que se mezclen sabores. Antes de que el ajo se haga demasiado ponemos una cucharilla de pimentón dulce, damos varias vueltas rápidas para que no se queme y a continuación echamos el tomate triturado. Removemos bien para que se integre todo y llegados a este punto pasamos todo el preparado de la sartén a la paella.
Para ello encendemos 2 fuegos de la cocina (si la paella es individual o para dos personas puede ser suficiente con un sólo fuego) pero la que yo suelo usar es de unas 4 raciones; y colocamos la paella sobre los fuegos de tal forma que quede el calor repartido de manera homogénea por toda su superficie.
Una vez en la paella, es momento de echar agua ¿Cuánta cantidad? Pues tenéis que echar agua hasta la mitad de los clavos que se ven por su interior y que están a la altura de las asas.
Dejamos que el agua hierva 20 minutos. Una vez pasado ese tiempo veréis que el agua ha disminuido por lo que nuevamente echaremos agua hasta la mitad de los clavos y dejaremos que hierva.
Una vez empieza a hervir probamos de sal, si hiciera falta (que suele hacer falta) añadimos sal en este momento, igualmente es el momento de poner el colorante (yo le doy unos 4 toques de colorante) y removemos bien con una cuchara de palo.
Una vez el agua ha roto a hervir toca echar el arroz. Os digo cómo lo hago yo y nunca falla, tenéis que echarlo de clavo a clavo, haciendo una pequeña montañita que ha de sobresalir del agua, pero no demasiado (en cuanto sobresale dejamos de echar arroz).
Yo lo echo directamente de la bolsa, moviéndola de un punto al otro de la paella.
Extendemos el arroz con una cuchara de palo en todas direcciones  para que quede bien repartido y ahora toca lo más aburrido, vigilar que se haga de manera uniforme.
Como hemos encendido dos fuegos de la vitro que serán de diferente tamaño toca ir moviendo cada poco tiempo la paella con pequeños movimientos circulares de tal forma que todo su contenido hierva por igual (no ha de hervir demasiado fuerte pero tampoco debe dejar de hacerlo, poned el fuego en el punto en que esto suceda, yo por ejemplo dispongo de una vitrocerámica cuya potencia máxima es 12, así que la suelo colocar en el 5)
Poco a poco iréis viendo que el agua se consume y que el arroz empieza a asomar, seguid dando pequeñas vueltas cogiendo la paella de sus asas.
Cuando dejen de aparecer burbujas de agua, estará lista.
Solo tendréis que dejarla reposar un rato para que todo posible pequeño resto de agua desaparezca. Unos 5 minutos serán suficientes.

OJO con:
- Las costillas: escogedlas con cierta cantidad de grasa, ya que lo que realmente da sabor a este plato es la carne. No caigáis en la tentación de cogerlas demasiado limpias.
- La paella: es importante hacerlo en una paella, en una olla no quedará jamás igual de seco y suelto. Normalmente las paellas que se venden por ahí se asocian con una determinada cantidad de raciones que suele quedarse corta.
La mia es de 6 raciones según el fabricante pero yo calculo que en realidad son 3 raciones. Por tanto esto os puede servir como referencia a la hora de compraros una.
- El arroz: tiene que ser redondo, no vale el arroz largo, ni el vaporizado.
- La cebolla: si, la tentación es fuerte, pero no le pongáis cebolla, ya que tiende a ablandar el arroz y lo que queremos es un arroz bien seco.

martes, 12 de abril de 2011

Tiramisú

Una receta italiana que gusta a casi todos, especialmente sencilla y fácil para principiantes en la cocina.

Ingredientes: (para un tiramisú de 3 alturas)

1 paquete de bizcochos de soletilla Mercadona
Café de cafetera (2 cafeteras)
2 envases de mascarpone (unos 500 grs)
2 huevos a temperatura ambiente
1 pizca de sal
130 grs de azúcar
2 cucharadas de amaretto por cafetera (4)
Cacao en polvo Valor o chocolate negro troceado


Preparación:

Empezamos por preparar dos cafeteras y dejamos enfriar el café al que añadiremos (una vez frío) un par de cucharadas de licor de amaretto por cafetera (en este caso 4).
Una vez frío el café, procedemos a separar las yemas de las claras. Éstas últimas las montaremos a punto de nieve con una pizca de sal (sabremos que están cuando formen picos y al girar el bol no se nos caigan).
En un recipiente hondo procedemos a mezclar las yemas con el azúcar hasta que la consistencia sea cremosa.
A continuación añadimos el mascarpone poco a poco, sin dejar de batir con las varillas y finalmente, ya con la espátula, incorporamos las claras a punto de nieve en forma envolvente para evitar que la mezcla pierda esponjosidad.
Una vez bien incorporadas, procedemos a montar el pastel para lo cual, en un molde cuadrado pequeño, vamos depositando en la base las soletillas previamente humedecidas en el café (procurando que no se nos rompan o queden demasiado secas).
A continuación una capa de la crema de mascarpone y espolvoreamos por encima con cacao en polvo Valor; nueva capa de soletillas, crema de mascarpone y cacao y así hasta terminar las 3 capas del tiramisú.
La última decoración con cacao en polvo es preferible dejarla para el momento de servir, así evitamos que se humedezca y quede feo. También podemos usar en su lugar, chocolate negro troceado.
Metemos en la nevera y dejamos enfríar durante, al menos, 3 horas. Al día siguiente aún está más rico.


sábado, 9 de abril de 2011

Cazuela de bacon, huevos y patata

Nueva receta extraída de uno de mis blogs favoritos L'exquisit . El resultado fantástico, es un plato muy sabroso y yo diría que apto para cualquiera que esté aprendiendo a cocinar ya que no requiere demasiados conocimientos. Por si fuera poco la presentación no puede ser más apetitosa.
He introducido un par de cambios, como no tenía puerros he utilizado ajos tiernos (aunque tampoco creo que sean imprescindibles) y como tampoco tenía a mano cebollino, he decorado con perejil picado.
Animáos a probar!!!
Allá vamos:

Ingredientes: (2 cazuelitas)

100 grs de bacon cortado a cubitos
1 patata grande pelada y cortada a cubitos
2 ajos tiernos
1 pizca de tomillo seco
2 huevos grandes
4 cucharadas soperas de creme fraîche
1/2 cucharilla de café de mantequilla
sal y pimienta
perejil picado para decorar

Preparación:

Precalentamos el horno a 175 grados.
Salteamos el bacon en una sartén (dependiendo de cómo sea de graso puede que necesitemos saltearlo con un pelín de aceite de oliva, yo por ejemplo compré un taco grande bacon en Mercadona y la verdad es que soltaba poca grasa así que me tocó saltearlo con un poquito de aceite, ya que como veréis la receta requiere que las patatas y los ajos tiernos se hagan en el aceite que sobre de sofreír el bacon).
Cuando esté lo retiramos con cuidado y lo dejamos sobre papel de cocina.
En el aceite que haya quedado de saltear el bacon, añadimos las patatas, el tomillo y los ajos tiernos cortados a rodajitas finas. A fuego lento y tapada la sartén con una tapa unos 15-20 minutos (no tengáis prisa). Yo de vez en cuando le daba unas vueltas con una cuchara de palo. Salpimentarlo ligeramente.
Una vez esté listo, lo ponemos en las cazuelitas de barro y añadimos una parte del bacon (reservamos un poco para decorar)
Vertemos 2 cucharadas soperas de creme fraîche por cazuela y rompemos un huevo en cada una, salpimentándolo.
Cortamos la cucharada de mantequilla en trozos pequeños y lo distribuímos por la cazuela (así tomará un color más bonito).
Yo en ese momento le añado los trocitos de bacon que reservé para decorar y los dispongo de tal manera que sobresalgan de la mezcla.
Metemos al horno ya precalentado a 175º y dejamos hasta que la clara esté cuajada de 15 a 20 minutos (yo necesité unos 18 minutos).
Decoramos con perejil picado y servimos inmediatamente.

OJO con:
- La creme fraîche: En la receta original hablaba de poner una cucharada sopera por cazuela, yo sin embargo le pongo dos, me gusta más así.
En cuanto al tema de dónde se puede conseguir, yo la encontré en Alcampo junto a las natas, puede que también en Consum la encontréis y no sé si en Mercadona. La marca que yo usé es Président.
Si no la encontráis quizá se podrá sustituir por una nata de cocina pero creo que el resultado no sería tan cremoso.
Para que os hagáis una idea de cómo es la creme fraîche, os diré que se parece a la salsa espesa y cremosa de las Bacon & Cheese Fries del Fosters Hollywood ¿ A qué ahora os apetece más probarla? ;-)



lunes, 4 de abril de 2011

Croissants rellenos de jamón york y queso. Receta fácil



Os dejo un vídeo de Youtube que a mi sirvió para aprender a hacer croissants. No os dejo ingredientes, ni preparación ya que está todo muy bien explicado.
El vídeo es de SpanishGirl25.
OJO con:
- El hojaldre: normalmente el que se usa es el refrigerado, por tanto con sacarlo justo en el momento de usar es suficiente. No lo hagáis antes o quedará blandito y quebradizo.
Tampoco es preciso estirarlo con rodillo, lo que si es necesario (a mi parecer) es echarle justo después de pintarlo de huevo un poco de azúcar para que cojan color, por el contraste con el jamón york y el queso y porque le da un toque crujiente muy rico.
- A la hora de rellenar el hojaldre: hay que tener cuidado de no excederse ya que puede acabar saliendo por fuera al cocerse en el horno. Yo siempre utilizo la medida de una cucharilla de café.
Además, según tengo comprobado, parece que cuando llevan menos relleno crecen más y mejor.
Tampoco los apretéis mucho con los dedos cuando los enrolléis, ya que así crecerán fácilmente.
- A la hora de pintarlos: sed generosos y pacientes pintadlos muy bien con el huevo batido por todas las esquinas ya que al crecer han de quedar bien dorados.
Otra opción para pintarlos es hacerlo con leche en lugar de con huevo, salen igualmente muy bonitos.
Espero que el vídeo os sirva de algo. Un abrazo.

sábado, 2 de abril de 2011

Empanadillas de carne

Esta receta está extraída de un blog de cocina muy popular, especializado en recetas gallegas; La cocina de Lechuza. En su receta utiliza 400 grs de carne picada, yo las he preparado hoy y con 200 grs ha sido suficiente.
He introducido algún pequeño cambio a la hora de hacer la carne ya que no tenía tomate rallado en casa, así que utilice tomate triturado.

Vamos allá:

Ingredientes:

1/2 vaso de agua
1/2 vaso de aceite (si es del de freír la carne mejor)
1/2 vaso de vino blanco
1 pizca de sal
Harina, la que admita

Para el relleno:

200 grs de carne picada mixta
tomate triturado
1/2 cebolla pequeña
1 pizca de pimentón dulce
ajo

Preparación:

Cortamos la cebolla finita, también el ajo, sofreímos. Cuando la cebolla se vuelva transparente volcamos la carne y salamos.
Cuando cambie de color añadimos la pizca de pimentón y el tomate triturado y revolvemos bien hasta que esté completamente hecha. Hay que dejarla un ratito a fuego lento, unos 10 minutos.
Dejamos enfríar.
Mientras vamos preparando la masa. En un bol echamos los ingredientes líquidos y la pizca de sal, revolvemos y a continuación vamos echando la harina que admita hasta obtener una masa que se despegue bien de las manos.
Dejamos reposar 15 minutos.
Extenderemos sobre la piedra de la cocina, previamente enharinada, valiéndonos de un rodillo. Hay que dejarla finita, pero cuidando que no se rompa.
Cortamos los círculos de la masa con un aro de emplatar o si no tenemos podemos usar un vaso del revés. A continuación rellenamos con una cucharita de la mezcla, pintamos los bordes de agua y cerramos con un tenedor presionando bien para que no se abran.
Las freímos en abundante aceite caliente y ponemos sobre un platito con papel de cocina.

Podemos hacerlas al horno, reduciendo el número de calorías. Para lo cual habría que pintarlas de huevo previamente.

OJO con:

- El aceite de la masa: Si usamos el propio aceite de freír la carne saldrá más sabrosa. Yo lo hice así y e resultado fue muy bueno, aunque tuve que completar lo que faltaba hasta el 1/2 vaso con un poco más de aceite crudo.
- La masa: Mucha paciencia, al llevar aceite es muy pegajosa y hay que trabajarla bien para que quede elástica y suelta. Añadid la harina poco a poco, no cometáis el error de ir con prisas y la pongáis toda de golpe.
- A la hora de cortar las empanadillas: El aro de emplatar facilita mucho las cosas, si no lo tenéis y hay que echar mano de un vaso, recordad que el vaso hace vacío contra la masa y a veces cuesta que se marque bien el círculo de la empanadilla, así que hay que hacer presión.
- A la hora de freír: El aceite ha de estar bien caliente aunque no humeando. Así se consiguen las atractivas burbujitas de la masa.
Otra cosa importante a recordar a la hora de freír es que las empanadillas han de cogerse con las dos manos para echarlas en la sartén y con cuidado de no estirarlas accidentalmente ya que quedarían demasiado alargadas. Si queremos que conserven su forma, simplemente las cogemos entre las dos manos y llevando un poco las manos hacia el cuerpo.
No olvidéis darle vueltas de vez en cuando si las hacéis en sartén en lugar de en freidora ya que se os pueden quemar.